Las estrellas fugaces
son pedruscos vestidos de princesa
El pegaso lleva
pezuñas de aterrizaje
Los lápices con goma
en el pecado traen la penitencia
Los turistas retoman las guías
como actores que olvidan el guión
Los alisadores
discrepan
En la ciudad, el café y el cafetero
terminan molidos
Los alveolos son en los pulmones
lo que los pulmones en los estadios de fútbol
Los violinistas aplauden moviendo el arco
como perros contentos
En los reflejos del agua
los paisajes se deshilachan
Las repeticiones
éranse dos veces